Rebecca Horn

Con Three Graces in Blue Rebecca Horn pretende recordar el mito griego de «Las tres Gracias» que representa a las hijas de Zeus, símbolo de la belleza, el amor, la sexualidad y la sabiduría, el cual ha sido pintado numerosas veces a lo largo de la Historia del Arte, por artistas tan reconocidos como Rubens, en el siglo XVII.

Audio explicación de la obra

Actividad

Nivel recomendado: tercer ciclo de educación primaria y educación secundaria.

Antes de proceder a la actividad os proponemos investigar un poco más sobre quienes eran las tres Gracias y cual es su historia. A su vez os proponemos que busquéis de qué manera se las ha representado tradicionalmente y qué conexiones podemos establecer entre la manera tradicional de representación y la más contemporánea de Rebecca Horn; ¿qué elementos clave se mantienen en ambos tipos de representaciones?

Ahora es vuestro turno de dar un toque contemporáneo a una leyenda o mito clásico…

-Escoged una leyenda o mito.

-Tal y como Rebecca Horn ha decidido realizar una escultura en forma de clepsidra recordando al tiempo cíclico, y contenedores en forma de pecho haciendo referencia al cuerpo de una mujer, idead una estructura que pueda representar o hacer referencia a la leyenda que habéis escogido. Sopesad si podríais incorporar un elemento conductor, así como Horn ha utilizado el agua.

-Realizad la escultura.

-Explicad brevemente la leyenda o mito que habéis representado y el proceso creativo que habéis seguido para realizar la escultura.

Biografía de la artista

Rebecca Horn (Alemania, 1944) es una artista multidisciplinar y poeta que realiza obras cinéticas, cinematográficas, instalaciones, video, esculturas y performances. Estudió en la Academia de Bellas Artes de Hamburgo, de donde tuvo que marchar un año más tarde por un problema de envenenamiento pulmonar. El año 1964, mientras vivía en Barcelona completamente aislada y débil por la enfermedad, solo trabajaba con materiales suaves y con pintura de madera, que utilizaba para dibujar en la cama. Poco a poco empezó a salir de su aislamiento para crear esculturas y extrañas extensiones con madera de balsa y tela, empezando así a producir sus primeras esculturas corporales.

La obra de Rebecca Horn aborda principalmente la obsesión del artista por el cuerpo imperfecto, su relación con la máquina, y el equilibrio entre la figura y los objetos. Sus trabajos más recientes se identifican con instalaciones cinéticas que proponen interesantes juegos a través de reflejos producidos por espejos, lentes, luz, música y la interacción con el espectador. Horn explora varias vías de expresión para las emociones, las fobias y la sensibilidad, investigando en el mundo de la metáfora, el sueño y la leyenda.