IMPLOSIÓ
Comisariado: Nekane Aramburu
Las historias de las colecciones, tanto públicas como privadas, rara vez son historias continuas hilvanadas de forma compacta. Las colecciones son pactos de amor y de memoria, constataciones y apuestas, afirmaciones y dudas, placer y tesis. Desde los museos se impone la responsabilidad de salvaguardar, documentar y dar a conocer estos fragmentos del devenir artístico, como objetos pero también como transmisores de ideas y vivencias.
Es Baluard, inmerso en una renovación fundamental que coincide con su décimo aniversario, quiere ante todo construirse como museo y dotar de personalidad a sus diferentes espacios mejorando la circulación zonal y configurando progresivamente las funciones según sus propiedades y sentido. Por ello, con «Implosió»,comenzamos a trabajar en la génesis de lo que será el epicentro de sus estrategias futuras, potenciando a partir de sus colecciones la reproducción de células madre como una nueva manera de entender la historia de la creación balear y sus relaciones internacionales con visiones poliédricas. Este intraimpulso es una detonación interior para dar lugar a una onda expansiva que desde dentro agite estados e ideas provocando la generación de un núcleo fisionable. Como en física, la onda expansiva forjada desde las propias entrañas libera grandes cantidades de energía, a modo de fenómeno catártico y de reforzamiento, ya que cuando algo implosiona los átomos se aproximan entre sí y aumentan en densidad.
Esta gran exposición se construye a través de cuatro áreas consecutivas diferenciadas para analizar desde la perspectiva de lo glocal (el contexto de las Illes Balears y la presencia del arte contemporáneo internacional). Las áreas de las que consta «Implosió» se articulan a través de ciertas continuidades estilísticas siguiendo la historiografía al uso pero proponiendo nuevas lecturas a la misma e incidiendo en puntos calientes cuyas ondas expansivas permitieron un avance en las prácticas artísticas contemporáneas.
La célula madre que impulsa las celdas producidas de esta regeneración articula la lectura de lo que ha sucedido en la producción artística de finales del XIX hasta nuestros días mediante tres sistemas de interpretación que conviven con carácter paralelo y simbiótico. Por ello, estos tres canales se monitorean a lo largo de la planta principal del museo a través de rutas entrecruzadas: Experiencia, Reflexión y Ejercicio. De esta manera, «Implosió» podrá asimismo convertirse en una plataforma estable para instruir las miradas y apoyarlas en la decodificación de lo que existe más allá de lo aparentemente real.