Es Baluard Museu d’Art Contemporani de Palma presenta «Felices los hijos de los tiempos intrascendentes», una exposición de Lluís Vecina Rufiandis que reflexiona acerca de la memoria, el territorio y el turismo de masas en el marco de la playa mallorquina de Sa Coma, en la zona del levante de la isla.
Comisariado por Marta Marín-Dòmine, el proyecto parte de las coincidencias biográficas de dos personajes: el fotógrafo Joan Andreu Puig Farran y el hotelero Jaume Moll que convergen en el mencionado lugar: la playa de Sa Coma, contexto y escenario de dos hechos determinantes, por un lado, se produjo el desembarco de las tropas republicanas en 1936 y, por otra, a partir de los años ochenta se ve convertido en un centro neurálgico del turismo de masas.
El primero, Puig Farran, había cubierto como periodista de guerra el desembarco en Sa Coma y, posteriormente, en los años 50, se reconvirtió profesionalmente en fotógrafo comercial creando una empresa productora de postales turísticas, lo que le dio ocasión de fotografiar los mismos lugares históricos, pero convertidos entonces en un escenario hotelero.
Por su parte, Jaume Moll fue uno de los principales contrabandistas de las Islas Baleares y fundó, con el capital acumulado a través de esta actividad, la cadena hotelera Royaltur construyendo en Sa Coma el Hotel Royal Mediterráneo.
A través de una instalación mediante fotografías, video, esculturas y documentos de archivo, Vecina Rufiandis hace patentes estas superposiciones temporales y contrapone el fenómeno del turismo con sus efectos erosionadores del territorio, de la historia y de la memoria, señalando que el complejo hotelero está situado en el lugar donde se ha localizado la fosa común más grande de la isla.
El proyecto, por lo tanto, es fruto de una exhaustiva investigación por parte del artista, el cual muestra múltiples caras de una historia viva en el paisaje de la isla. Los años sesenta, Mallorca, el turismo… resuenan en el imaginario colectivo como una promesa de modernización y de activación económica. Vecina Rufiandis, no obstante, pone el foco en los cuerpos extendidos en la playa, yuxtaponiendo la línea temporal que separa los que se encuentran de vacaciones con los 500 milicianos desaparecidos durante el desembarco.
Marta Marín-Dòmine, comisaria de la exposición, explica que “desde el punto de vista artístico, me parece muy interesante la mirada de Lluís Vecina Rufiandis, ausente de toda melancolía. El artista nos hace imaginar el pasado, no tanto para ir a encontrarlo como porque a partir de allí nos damos cuenta de las transformaciones que ha sufrido la isla en manos de depredadores de capital. Capital humano y natural, que ha escondido otro capital, el de la historia, y que todavía permanece escondido.”
Lluís Vecina Rufiandis, artista, añade que la instalación “pretende enfatizar sobre el fenómeno del turismo para disputar dentro del terreno de lo simbólico, los imaginarios que hemos heredado”.
Para David Barro, director de Es Baluard Museu, “Lluís Vecina Rufiandis declina dos realidades distantes pero cercanas cuando su efecto puede resultar devastador: la ocupación militar y la ocupación turística desenfrenada. Relaciona así paisaje y memoria, conjugando lo político desde lo poético a partir de distintas capas de información”.
La exposición se inaugura al público el jueves 17 de octubre de 2024 a las 19 horas y se podrá visitar a partir del 18 de octubre en el Espacio D de Es Baluard Museu hasta el 19 de enero de 2025.