En Es Baluard Museu se entiende la accesibilidad como un derecho fundamental y está comprometido con ello implicándose en su renovación constante, acorde con las demandas de la sociedad.
Las barreras pueden ser de diversa índole, y se agrupan en dos grandes grupos: físicas e intelectuales. Algunas de las medidas a adoptar por las instituciones culturales para subsanarlas son, en el caso de los impedimentos físicos, rampas y ascensores y, en el caso de impedimentos intelectuales, programas y cartelas para distintos niveles y códigos cognitivos así como el uso de multimedia.
El museo está adaptado en un 100% a personas discapacitadas con dificultades de movimiento.
Se cumple con el reglamento para la mayoría de la accesibilidad y la supresión de barreras arquitectónicas del Decreto 96/1994. El Museo tiene instaladas rampas cuyo trazado discurre desde la planta 0 hasta la planta 2, cumpliendo con los límites en cuanto a pendientes del 8%.
Del mismo modo, se encuentran también instalados dos ascensores, uno que recorre desde la planta 0 hasta la salida directa al patio central y otro de tres cabinas que permite acceder desde la planta 0 hasta la planta 2.
El museo pone a disposición de los visitantes que lo precisen una silla de ruedas para facilitar el movimiento por los diferentes espacios.
Se admiten perros guía y de asistencia en todo el recinto del museo.
Los visitantes con minusvalías disponen de lavabos adaptados en la planta 0 y la planta 1 según las condiciones de la normativa vigente.
Es Baluard lleva cabo proyectos y propuestas inclusivas adaptadas con y para los diferentes colectivos trabajando junto a ellos. De este modo desarrollamos propuestas que apuestan por la normalización y participación activa de toda la sociedad considerando a aquellos que tienen dificultades de todo tipo para integrarse con normalidad en las experiencias y recorridos culturales. Así mismo se realizan visitas personalizadas y adaptadas a grupos con dificultades especiales que así lo soliciten.
Nuestro objetivo es garantizar la atención, calidad e integración plena de públicos diversos, hasta alcanzar la Accesibilidad Universal en todos los ámbitos (arquitectónico, humano y de contenidos).
Nota sobre Inclusividad
Una institución cultural inclusiva apuesta por incluir a todos aquellos agentes, comunidades y grupos diversos que quieran formar parte de ella. En un sentido básico, la inclusividad pasa por cuestiones de accesibilidad tanto de carácter intelectual como físico, concretándose por ejemplo en la atención del museo por generar espacios habitables y comprensibles para todo tipo de personas. En un nivel más profundo, la inclusividad tiene que ver además con el objetivo de trabajar con los públicos del museo, permitiéndoles participar a la vez que haciéndoles agentes y motor de cambio de la institución misma. Esto tiene hondas repercusiones en la conformación misma de la institución cultural, dando lugar a cambios en estructuras departamentales, políticas de representación y dinámicas temporales y espaciales.